Denominamos vidrio monolítico a aquel constituido por una única lámina de vidrio para diferenciarlo del vidrio compuesto constituido por dos o más láminas, como sucede con el vidrio de seguridad laminado, o con el doble acristalamiento.
Dentro de los monolíticos encontramos infinidad de variedades:
El denominado vidrio recocido o float, (en referencia a su proceso de fabricación) puede ser incoloro, que es el vidrio común utilizado comercialmente y que encontramos en espesores desde 2 a 19 mm, de color (gris, verde, bronce, etc ) o extraclaro, que es un vidrio con bajo contenido en óxidos de hierro y especialmente nítido, ya que no presenta la tonalidad verde propia de los vidrios.
Los vidrios decorados también se encuentran en este grupo, con infinidad de motivos y texturas que ya vienen impresos o grabados de fábrica, tales como por ejemplo y solo por citar algunos de ellos, el delta, el escarcha o el picks. Los vidrios armados (con alambre en su interior), los vidrios mateados al ácido o al chorro de arena, o los vidrios lacados, también se encuentran dentro de los vidrios monolíticos.